¿Alguna vez sentiste que no pertenecías a un grupo? ¿O como si otras personas fueran a descubrir que eras un fraude? ¿Sentís que no merecés tu trabajo y tus logros?
Si es así, sabé que no te pasa solo a vos. Alrededor del 70% de las personas experimentan estos sentimientos del Síndrome del Impostor en algún momento de su vida. Y no importa si estudiaste o no, tu rango en la empresa para la que trabajás, o cuan impresionantes son tus logros.
En definitiva el Síndrome del Impostor aplica a cualquier persona que sea incapaz de interiorizar y apropiarse de sus éxitos. Y obviamente, como todo en la vida hay variedad de casos.
Están los perfeccionistas que se fijan expectativas extremadamente altas para sí mismos, y aunque cumplan el 99,99% de sus objetivos, se sienten fracasados. Cualquier pequeño error les hará cuestionar su propia capacidad, en lugar de capitalizar el aprendizaje.
Los perfeccionistas buscan constantemente nuevas formaciones para mejorar sus habilidades. O necesitan conocer todos los detalles antes de embarcarse en un proyecto. O no aplican a un puesto de trabajo si no cumplen absolutamente todos los criterios del anuncio. O prefieren quedarse callados en una reunión, antes que quedar mal parados. En definitiva, el perfeccionista se esfuerza y la pasa bastante mal, porque piensa que no es suficiente.
También están los solitarios que tienden a realizar todo solos, porque si tienen que pedir ayuda se sienten menos. Son superhombres o supermujeres que demuestran al mundo que ellos pueden solos y de ninguna manera son impostores. Y claro, cuanto más piensan: “no soy impostor, no soy impostor”, ya sabemos lo que pasa. Lo que resiste, persiste.
¿Cómo se trabaja el Síndrome del Impostor en una sesión de Terapia de Transformación Rápida RTT?
Una parte central de RTT son las regresiones. Con las regresiones se vuelve a la causa raíz del Síndrome del Impostor. Se comprende cómo, por qué, dónde y cuándo adoptaste los comportamientos que te perjudican. A veces las personas recuerdan que sus notas no eran lo suficientemente buenas para sus padres, o que a sus hermanos les iba mejor en el colegio. Y claro, cualquier niñ@ quiere “pertenecer”, sentirse igual al resto y sentirse amado, y así llega a creencias como “si me saco una buena nota, si soy perfecto, me van a querer más y eso me da seguridad”. Y ahí arranca todo….
Cada persona es como un diamante con dones y capacidades únicas. Sentirte como un impostor claramente te perjudica, te debilita, no permite que tu potencial aflore… Te impide responder a los desafíos con tu 100%, porque te sentís menos, incluso siendo igual de competente que el resto de las personas.
Pero esto es una excelente noticia. Porque las creencias y programas mentales obsoletos o improductivos pueden reprogramarse. Deshacerte del Impostor en tu vida te permite avanzar hacia un futuro libre de autosabotages.
En Terapia de Transformación Rápida reprogramás la mente subconciente para el éxito generalmente en sólo 1 sesión. La mente subconsciente es el programa informático de fondo que se está ejecutando continuamente y de forma involuntaria.
Y es normal que en algunas áreas te sientas un impostor. Yo me siento una impostora haciendo el mantenimiento en mi casa. Es que tengo un marido que sabe hacer de todo. El tema es que no te sientas un impostor en el trabajo o en el amor.
Te invito a hacer un Test del Síndrome del Impostor para que descubras si te está afectando.